Siamés
Siamés
El Gato Siamés es una de las razas más antiguas y reconocibles del mundo. Su historia comienza en el antiguo Siam (actual Tailandia), donde era considerado un animal sagrado, reservado para la realeza y los templos. Fue introducido en Europa a finales del siglo XIX, y su elegancia exótica cautivó a los criadores rápidamente. Su figura esbelta, ojos intensos y pelaje colorpoint lo han convertido en uno de los gatos más queridos y emblemáticos del planeta.
Origen del Siamés
Durante siglos, el Siamés fue considerado un gato sagrado en Tailandia. Se decía que albergaban las almas de los nobles fallecidos, por lo que vivían en los templos y palacios, protegidos y venerados. En el siglo XIX comenzaron a llegar a Europa como obsequios reales, y rápidamente se convirtieron en símbolos de elegancia y exotismo. Hoy, el Siamés moderno es el resultado de generaciones de selección enfocadas en acentuar su estilizado cuerpo y colorido pelaje.
Personalidad y comunicación
Si hay una palabra que define al Siamés es: expresivo.
Maúlla constantemente y de forma muy característica. Su voz es fuerte, profunda y casi humana.
Usa su voz para comunicar necesidades, emociones o simplemente conversar contigo.
Muchos dueños sienten que “hablan” con su Siamés todos los días, ¡y es cierto!
Características físicas
Cuerpo: Delgado, alargado y muy elegante.
Cabeza: Triangular, con perfil recto y hocico fino.
Orejas: Grandes y puntiagudas, muy abiertas.
Ojos: Almendrados, de un azul intenso y penetrante.
Pelaje: Corto, fino y brillante, pegado al cuerpo.
Colores: Lo más distintivo es su patrón colorpoint, con el cuerpo claro y extremidades más oscuras.
Variedades y colores
Aunque todos los Siameses comparten el patrón colorpoint, hay varias combinaciones de colores aceptadas:
Seal point: cuerpo crema con puntos marrón oscuro (el más clásico).
Blue point: cuerpo grisáceo claro con puntos gris azulados.
Chocolate point: cuerpo marfil con puntos marrón chocolate.
Lilac point: cuerpo blanco hielo con puntos gris rosado.
Red point: puntos rojizos sobre fondo blanco cálido.
También existen variedades tabby point y tortie point, menos comunes.
Nota: A lo largo del tiempo han surgido dos líneas de Siamés:
Siamés tradicional (Thai): más robusto y de rostro redondeado.
Siamés moderno: más delgado, estilizado y angular, con orejas muy largas.
¿Es ideal como mascota?
¡Sí, si tienes tiempo para compartir con él! El Siamés es un compañero leal, sensible y muy expresivo, que necesita amor y atención diaria. Es perfecto para personas que buscan un gato activo, comunicativo y muy afectuoso. No es recomendable para quienes están fuera de casa muchas horas, pero sí para familias, parejas o personas que deseen un amigo gatuno que nunca pase desapercibido.
Cuidados del Caniche
1. Inteligencia y estimulación
El Siamés es uno de los gatos más inteligentes del mundo felino.
Aprende rápidamente rutinas, órdenes sencillas y hasta puede abrir armarios o puertas.
Disfruta de juguetes interactivos, circuitos de inteligencia, escondites y actividades que le estimulen mentalmente.
Si no se le da atención ni juegos, puede frustrarse o volverse destructivo.
2. Salud mental y emociones
El Siamés es un gato muy emocional.
Forma vínculos profundos con su persona favorita y puede sentirse triste o ansioso si se queda solo mucho tiempo.
Necesita interacción diaria, mimos, juegos y presencia humana.
Puede llegar a desarrollar estrés o conductas obsesivas si no se le brinda suficiente atención.
Por eso, no es recomendable para hogares donde pase mucho tiempo solo. En ese caso, lo ideal es tener otro gato como compañero (preferiblemente otro Siamés o una raza sociable).
3. Relación con humanos y niños
El Siamés es sumamente sociable.
Le encanta estar cerca de las personas, seguirlas por la casa y participar en todo lo que hacen.
Suele formar un vínculo especial con una persona, aunque se lleva bien con toda la familia.
Tolera bien a los niños si estos lo tratan con respeto, y disfruta de la compañía constante.
4. Alimentación y salud
- Metabolismo rápido: necesita una dieta nutritiva, equilibrada y adaptada a su energía.
Sensible al frío por su bajo nivel de grasa corporal.
Pueden ser propensos a:
Problemas dentales
Estrabismo (común, pero no dañino)
Enfermedades respiratorias y cardíacas en líneas extremas
